Los Diez Mandamientos

La historia de los Diez mandamientos de Moisés, es una de las
más hermosas y fantásticas historias reales que tiene la Biblia; sobre
todo teniendo en cuenta que la Biblia en su mayoría, son historias no
reales que reflejan un estado de conciencia que en ese momento se
quiere explicar. Pero como Moisés fue un personaje real, y las cosas
que le sucedieron fueron reales, merece aclararlo; pero también
debemos dar luz a algunos elementos que le van a dar un giro
dramático a su maravillosa vida.
Debido a que Moisés no era un improvisado, sino alguien que
había recibido la educación prevista para un faraón, la cual lo
entrenada en las más altas artes de la Magia y el Esoterismo; cuando
subió al Monte Sinaí y le fueros revelados los Diez mandamientos; los
redactó de manera tal que pudieran caber tres interpretaciones juntas:
la literal, la metafísica y la espiritual. La literal todos la conocen, la
espiritual es solo para espíritus puros, y hoy vamos a explicar la
metafísica. Cabe una aclaración, cuando en este texto se dice NO, la
explicación literal es que no debes hacerlo (con la amenaza del
castigo), la explicación metafísica es que NO PUEDES, por más que lo
intentes. La literal es para las almas que están más atrasadas en el
proceso de evolución; y la metafísica es para las almas viejas que
aspiran un sendero espiritual.
No tendrás dioses ajenos delante de mi: no puedes adorar a dos
dioses a la vez, o le das poder a las enfermedades, problemas,
carencias, etc, o le das todo el poder a Dios en tu corazón, no puedes
servir a dos amos porque terminarás sirviendo al de menor valor para
No te harás imágenes: no puedes hacerte imágenes de Dios,
porque es Espíritu, y el espíritu está en todas las cosas. A Dios nunca lo
vas a ver, pero si verás sus efectos, que son el perdón, amor y
compasión, por ejemplo.
No tomarás el nombre de tu Dios en vano: el nombre de Dios es
YO SOY, y cada vez que lo dices, te conectas con ese espíritu que está en
tu corazón y va a realizar lo que venga después. Si tu dices YO SOY de
salud débil; con toda seguridad te enfermarás porque el YO SOY es
poderoso y no es en vano decirlo. Por eso debes afirmar siempre YO SOY SALUD.

Acuérdate del día del reposo para santificarlo: el día del
reposo significa que en todo proceso de precipitación, debe haber una
pausa en tu mente y emociones para aceptar dentro de ti que eso que
deseas ya fue otorgado. Puedes hacerlo en oración o meditación.
Honra a tu padre y a tu madre: tu padre son los pensamientos y
tu madre tus emociones; honrarlos sería que los usaras
constructivamente para crear cosas bellas.
No matarás: no puedes matar, por más que lo intentes, porque
la esencia del ser humano es espíritu y jamás podrás con eso.
No cometerás adulterio: no puedes adulterar las cosas, porque
la verdad siempre se manifiesta, la mentira siempre se descubre y la
verdad prevalece.
No hurtarás: es imposible que puedas robar algo, porque lo que
no te pertenece por derecho de conciencia jamás será tuyo. Por otro
lado, lo que te pertenezca por derecho de conciencia, jamás podrá ser
robado o perdido; estos son los “tesoros en el reino de los cielos” que hablaba Jesús.

No hablarás contra tu prójimo falso testimonio: como dice el
sabio Emerson: “lo que eres grita tan fuerte que no oigo lo que me
dices”. O mas claramente “por sus frutos los conocereis”. No puedes
juzgar a nadie, ni calificarlo, ya que la verdad se manifestará y su
verdadero espíritu mostrará con obras como es él.
No codiciarás: no necesitas codiciar, solamente necesitas
decretar y afirmar que eso que deseas ya lo tienes por derecho de
conciencia.
Los invito a meditar en estos mandamientos, que como verán no
son órdenes con penas y castigos para los que no lo cumplen; sino la
explicación de cómo funcionan las Leyes del Universo, y como hacer
para tener una vida maravillosa y llegar a la Tierra Prometida.

La historia de los Diez mandamientos de Moisés, es una de las
 
más hermosas y fantásticas historias reales que tiene la Biblia; sobre
 
todo teniendo en cuenta que la Biblia en su mayoría, son historias no
 
reales que reflejan un estado de conciencia que en ese momento se
 
quiere explicar. Pero como Moisés fue un personaje real, y las cosas
 
que le sucedieron fueron reales, merece aclararlo; pero también
 
debemos dar luz a algunos elementos que le van a dar un giro
 
dramático a su maravillosa vida.
 
Debido a que Moisés no era un improvisado, sino alguien que
 
había recibido la educación prevista para un faraón, la cual lo
 
entrenada en las más altas artes de la Magia y el Esoterismo; cuando
 
subió al Monte Sinaí y le fueros revelados los Diez mandamientos; los
 
redactó de manera tal que pudieran caber tres interpretaciones juntas:
 
la literal, la metafísica y la espiritual. La literal todos la conocen, la
 
espiritual es solo para espíritus puros, y hoy vamos a explicar la
 
metafísica. Cabe una aclaración, cuando en este texto se dice NO, la
 
explicación literal es que no debes hacerlo (con la amenaza del
 
castigo), la explicación metafísica es que NO PUEDES, por más que lo
 
intentes. La literal es para las almas que están más atrasadas en el
 
proceso de evolución; y la metafísica es para las almas viejas que
 
aspiran un sendero espiritual.
 
No tendrás dioses ajenos delante de mi: no puedes adorar a dos
 
dioses a la vez, o le das poder a las enfermedades, problemas,
 
carencias, etc, o le das todo el poder a Dios en tu corazón, no puedes
 
servir a dos amos porque terminarás sirviendo al de menor valor para
 
No te harás imágenes: no puedes hacerte imágenes de Dios,
 
porque es Espíritu, y el espíritu está en todas las cosas. A Dios nunca lo
 
vas a ver, pero si verás sus efectos, que son el perdón, amor y
 
compasión, por ejemplo.
 
No tomarás el nombre de tu Dios en vano: el nombre de Dios es
 
YO SOY, y cada vez que lo dices, te conectas con ese espíritu que está en
 
tu corazón y va a realizar lo que venga después. Si tu dices YO SOY de
 
salud débil; con toda seguridad te enfermarás porque el YO SOY es
 
poderoso y no es en vano decirlo. Por eso debes afirmar siempre YO
 
SOY SALUD.
 
Acuérdate del día del reposo para santificarlo: el día del
 
reposo significa que en todo proceso de precipitación, debe haber una
 
pausa en tu mente y emociones para aceptar dentro de ti que eso que
 
deseas ya fue otorgado. Puedes hacerlo en oración o meditación.
 
Honra a tu padre y a tu madre: tu padre son los pensamientos y
 
tu madre tus emociones; honrarlos sería que los usaras
 
constructivamente para crear cosas bellas.
 
No matarás: no puedes matar, por más que lo intentes, porque
 
la esencia del ser humano es espíritu y jamás podrás con eso.
 
No cometerás adulterio: no puedes adulterar las cosas, porque
 
la verdad siempre se manifiesta, la mentira siempre se descubre y la
 
verdad prevalece.
 
No hurtarás: es imposible que puedas robar algo, porque lo que
 
no te pertenece por derecho de conciencia jamás será tuyo. Por otro
 
lado, lo que te pertenezca por derecho de conciencia, jamás podrá ser
 
robado o perdido; estos son los “tesoros en el reino de los cielos” que
 
hablaba Jesús.
 
No hablarás contra tu prójimo falso testimonio: como dice el
 
sabio Emerson: “lo que eres grita tan fuerte que no oigo lo que me
 
dices”. O mas claramente “por sus frutos los conocereis”. No puedes
 
juzgar a nadie, ni calificarlo, ya que la verdad se manifestará y su
 
verdadero espíritu mostrará con obras como es él.
 
No codiciarás: no necesitas codiciar, solamente necesitas
 
decretar y afirmar que eso que deseas ya lo tienes por derecho de
 
conciencia.
 
Los invito a meditar en estos mandamientos, que como verán no
 
son órdenes con penas y castigos para los que no lo cumplen; sino la
 
explicación de cómo funcionan las Leyes del Universo, y como hacer
 
para tener una vida maravillosa y llegar a la Tierra Prometida.La historia de los Diez mandamientos de Moisés, es una de las
 
más hermosas y fantásticas historias reales que tiene la Biblia; sobre
 
todo teniendo en cuenta que la Biblia en su mayoría, son historias no
 
reales que reflejan un estado de conciencia que en ese momento se
 
quiere explicar. Pero como Moisés fue un personaje real, y las cosas
 
que le sucedieron fueron reales, merece aclararlo; pero también
 
debemos dar luz a algunos elementos que le van a dar un giro
 
dramático a su maravillosa vida.
 
Debido a que Moisés no era un improvisado, sino alguien que
 
había recibido la educación prevista para un faraón, la cual lo
 
entrenada en las más altas artes de la Magia y el Esoterismo; cuando
 
subió al Monte Sinaí y le fueros revelados los Diez mandamientos; los
 
redactó de manera tal que pudieran caber tres interpretaciones juntas:
 
la literal, la metafísica y la espiritual. La literal todos la conocen, la
 
espiritual es solo para espíritus puros, y hoy vamos a explicar la
 
metafísica. Cabe una aclaración, cuando en este texto se dice NO, la
 
explicación literal es que no debes hacerlo (con la amenaza del
 
castigo), la explicación metafísica es que NO PUEDES, por más que lo
 
intentes. La literal es para las almas que están más atrasadas en el
 
proceso de evolución; y la metafísica es para las almas viejas que
 
aspiran un sendero espiritual.
 
No tendrás dioses ajenos delante de mi: no puedes adorar a dos
 
dioses a la vez, o le das poder a las enfermedades, problemas,
 
carencias, etc, o le das todo el poder a Dios en tu corazón, no puedes
 
servir a dos amos porque terminarás sirviendo al de menor valor para
 
No te harás imágenes: no puedes hacerte imágenes de Dios,
 
porque es Espíritu, y el espíritu está en todas las cosas. A Dios nunca lo
 
vas a ver, pero si verás sus efectos, que son el perdón, amor y
 
compasión, por ejemplo.
 
No tomarás el nombre de tu Dios en vano: el nombre de Dios es
 
YO SOY, y cada vez que lo dices, te conectas con ese espíritu que está en
 
tu corazón y va a realizar lo que venga después. Si tu dices YO SOY de
 
salud débil; con toda seguridad te enfermarás porque el YO SOY es
 
poderoso y no es en vano decirlo. Por eso debes afirmar siempre YO
 
SOY SALUD.
 
Acuérdate del día del reposo para santificarlo: el día del
 
reposo significa que en todo proceso de precipitación, debe haber una
 
pausa en tu mente y emociones para aceptar dentro de ti que eso que
 
deseas ya fue otorgado. Puedes hacerlo en oración o meditación.
 
Honra a tu padre y a tu madre: tu padre son los pensamientos y
 
tu madre tus emociones; honrarlos sería que los usaras
 
constructivamente para crear cosas bellas.
 
No matarás: no puedes matar, por más que lo intentes, porque
 
la esencia del ser humano es espíritu y jamás podrás con eso.
 
No cometerás adulterio: no puedes adulterar las cosas, porque
 
la verdad siempre se manifiesta, la mentira siempre se descubre y la
 
verdad prevalece.
 
No hurtarás: es imposible que puedas robar algo, porque lo que
 
no te pertenece por derecho de conciencia jamás será tuyo. Por otro
 
lado, lo que te pertenezca por derecho de conciencia, jamás podrá ser
 
robado o perdido; estos son los “tesoros en el reino de los cielos” que
 
hablaba Jesús.
 
No hablarás contra tu prójimo falso testimonio: como dice el
 
sabio Emerson: “lo que eres grita tan fuerte que no oigo lo que me
 
dices”. O mas claramente “por sus frutos los conocereis”. No puedes
 
juzgar a nadie, ni calificarlo, ya que la verdad se manifestará y su
 
verdadero espíritu mostrará con obras como es él.
 
No codiciarás: no necesitas codiciar, solamente necesitas
 
decretar y afirmar que eso que deseas ya lo tienes por derecho de
 
conciencia.
 
Los invito a meditar en estos mandamientos, que como verán no
 
son órdenes con penas y castigos para los que no lo cumplen; sino la
 
explicación de cómo funcionan las Leyes del Universo, y como hacer
 
para tener una vida maravillosa y llegar a la Tierra Prometida.